Escasas son las noches en que la luna me cobija.
Pocos, los que a tiempo parcial me dan los buenos días.
Incisas las miradas extrañas que me cruzo,
acompañan los momentos de álgida monotonía.
Sin embargo no me pesa la rutina, por que sigo viviendo la vida.
Quizá mañana me despierte, con una malévola sonrisa...
Pocos, los que a tiempo parcial me dan los buenos días.
Incisas las miradas extrañas que me cruzo,
acompañan los momentos de álgida monotonía.
Sin embargo no me pesa la rutina, por que sigo viviendo la vida.
Quizá mañana me despierte, con una malévola sonrisa...